Es un símbolo, diminuto, para la memoria instantánea del siglo XXI. No preguntaremos a día de hoy ¿que bailaron?, pocos responderán.
Decisiones importantes, todas, y algunas que trascendieron a la historia se tomaron alrededor de un Roble/Haritz.
Todos los días nos mira y nos cuida. Silencioso, El es el centro de nuestro Euskal Echea.
Sin querer. una biribilketa, comenzó a tejer el epilogo de esta generacion.
PROMOCIÓN 2019
AITOR ALAVA
29/10/19
0 comentarios:
Publicar un comentario