TRANPALDOAN
Creo recordar, primera vez año 1999, alarde de txistularis fiestas de Amurrio, 15 de agosto, todos los grados, a las 12 de mediodía. Reciclamos un traje de esquimal del carnaval anterior un casco de moto viejo y una varas de avellano sin dueño hicieron el resto. En aquel momento replicamos un modelo ya hecho, la capacidad de discernimiento no estaba alojada en nuestras mentes, aun. Era un algo, al que le debía una vuelta,,, es mas simbólico que bailado, es mas sentido, que técnico, es un impacto al corazón de las metáforas vascas. El Hartza vino para quedarse. Le hemos conocido y nos dejo enseñanzas que solo el secreto de la noche puede desvelar.
El HARTZAREN EHIZA, ya es nuestro y lo seguiremos haciendo nuestro, nos hicimos dueños de su legado y nos acompañará allá donde vayamos!
AITOR ALAVA
17/11/16
17/11/16
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